8. Ujieres muy entusiastas
Una vez participé como voluntaria del grupo de ujieres, junto con doce personas mas (era una iglesia bastante grande). Nos pusieron a unos 30 pies de distancia entre nosotros para que estratégicamente cada uno de nosotros pudiéramos saludar mínimo a tres personas antes de que llegaran al santuario.
¿En verdad necesitan tener tanta atención repetitiva los visitantes?
También me ha tocado estar del otro lado de las cosas, recibiendo muchos panfletos e interminables saludos de bienvenida, y con toda certeza puedo decir que no es necesario tener una inundación de saludos por personas desconocidas antes de que te sientes en tu silla de la iglesia. A vece también te puedes llegar a encontrar que ciertos estacionamientos son solo para visitantes, y si no te das cuenta puede que uno de estos amigables ujieres te pida que muevas tu carro… y a veces se da la impresión de que no eres bienvenido.