9. Pastores que promueven sus propios libros
Hoy en día parece ser raro encontrar un pastor que no sea también autor. Y más raro ver que estos pastores no promuevan sus libros cuando están en el púlpito. Sin importar las buenas intenciones de sus acciones qué tan bueno y relevante sea el libro que ahora promueve, este tipo de pastores se pueden parecer a promotores y publicistas para su propio beneficio. Los pastores deberían de estar atentos a no cometer este tipo de errores ya que pueden crear otros tipos de problemas de interés dentro de la iglesia. Claro está, que es válido que los pastores hagan referencia a los libros de su autoría cuando predican el mensaje siempre y cuando se mantenga la Biblia como principal herramienta para la predicación.
Aun si el pastor es bien recibido y cuenta con la confianza de su congregación, las personas que lleguen por primera vez puede que no sepan o que no conozcan que el pastor ha escrito un libro lo que se puede originar confusiones.