1. La Trinidad es una doctrina bíblica.
Desde el libro de Génesis, capítulo uno, ya vemos esta doctrina. El primer versículo menciona a Dios. El segundo, al Espíritu. Y en el tercero, se menciona la palabra “dijo”, que es en hebreo ’amar y en griego lego (o logos en sustantivo [en la Septuaginta]). Podemos argumentar que Jesucristo —quien es el logos, la Palabra de Dios mediante la cual el universo fue creado— está presente en ese versículo tres.
Otro pasaje es Génesis. 1:26, donde Dios dice “hagamos” en plural. El reconocido teólogo Tom Schreiner dice de Génesis 1:1-3 y 26: “Un punto de vista canónico apoya una lectura trinitaria, la cual se sugiere por las palabras mismas del texto y confirmadas por el canon entero”.[1] ¡Hay muchísimos otros pasajes que mencionan a un Dios trino! Aunque la lista no es completa, algunos de estos son: Salmo 110:1; Isaías 63:10; Isaías 42:1; 48:16; 61:1; Mateo 3:16-17; y 1 Corintios 12:4-6.