Pedir perdón. Lo primero que debemos hacer es reconocer cuando ese anhelo no está. La falta de interés por la Palabra es solo una expresión de nuestra falta de interés por Dios. El escaso entusiasmo por la Palabra es evidencia elocuente de apatía espiritual. Por lo tanto, todo intento de crecer en anhelo por la biblia comienza con un reconocimiento del pecado de no anhelarla, y eso nos debe llevar al arrepentimiento. Porque si anhelar es un mandato, no hacerlo es un pecado. Es decir, el creyente que no anhela la palabra de Dios (como un niño anhela la leche) está técnicamente en desobediencia. Necesita arrepentirse. Necesita el perdón de Dios. Ademas de esto, debemos tener presente que el corazón siempre está amando, deseando y atesorando algo. Y cuando no estamos amando a Dios, y a su Palabra, debemos concluir que hemos cambiado nuestro amor, estima y deseo por otras cosas, y de eso debemos arrepentirnos. Debemos reconocerlo y pedir a Dios que nos perdone. Cuando atesoramos algo aparte de Dios, le hacemos una gran afrenta. Esa es la esencia del pecado: cambiar la gloria del Creador por la creación (Rom 1:25).
About Gerson Morey
Gerson Morey es pastor en la Iglesia Día de Adoración en la ciudad de Davie en el Sur de la Florida y autor del blog cristiano El Teclado de Gerson. Está casado con Aidee y tienen tres hijos, Christopher, Denilson y Johanan.