Pregunta: “¿Quién es José Luis de Jesús Miranda? ¿Es José Luis de Jesús Miranda el anticristo?”
Respuesta: En pocas palabras, José Luis de Jesús Miranda es un hereje. Es un falso Mesías que clama ser la segunda venida de Jesucristo. Se refiere a él mismo como “Jesucristo hombre.” El es un nativo de Puerto Rico, quien afirma que fue en 1973, a través de una visión recibida por él, que Jesucristo “se integró con él”. En 1998, aseguró que él era la reencarnación del apóstol Pablo. En 2005, él oficialmente anunció que él era Cristo.
El movimiento de José Luis de Jesús Miranda tiene todas las características clásicas de un culto. Está la demanda de autoridad extra-bíblica, acreditada por la visión de Cristo integrándose con él. Está el hecho de que José Luis de Jesús Miranda es el único e indiscutible líder de su movimiento, al ejercer una autoridad total sobre su iglesia y ministerio. Está la enseñanza de exclusividad doctrinal, tales como la no existencia del diablo, el infierno y el pecado; la inutilidad de la oración, y la irrelevancia del código moral de Dios (p. ej. los Diez Mandamientos). El explota a su gente financieramente, viviendo vida de lujos mucho más allá de lo que reporta, basada en la generosidad de sus seguidores. Finalmente, está la Cristología defectiva. Él clama ser más grande que Jesucristo y que sus enseñanzas reemplazan a las de Cristo. Aún se refiere a sí mismo como el Anticristo y tiene un “666” tatuado en su antebrazo, sosteniendo que puesto que él es Cristo, la adoración a Jesucristo no es válida.
La Biblia predice que vendrá gente en los últimos días diciéndose ser el Cristo. En Mateo 24:5, Jesús les dice a Sus discípulos “Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán.” Una de las señales de que el final de los tiempos está próximo, es la del surgimiento de falsos Mesías – gente que proclama ser el segundo advenimiento de Jesucristo.
Sin embargo, ¿cómo describe Jesús mismo Su retorno a la tierra? Nuevamente en Mateo 24, Jesús nos dice las señales específicas que deben ocurrir antes de Su regreso. En los vv. 3-14, Jesús las describe como “dolores de parto” – como signos que indicarán que su regreso está cerca. Él utiliza la imagen de una mujer dando a luz. Justo antes del nacimiento del niño, la mujer experimentará los dolores de parto, los cuales comenzarán leves y espaciados, pero se volverán más frecuentes y más dolorosos conforme se aproxima el momento del nacimiento. Los “dolores de parto” que Jesús describe son estos: 1) el surgimiento de falsos Mesías; 2) guerras y rumores de guerras; 3) hambrunas y desastres naturales; 4) incremento en la persecución de la verdadera iglesia de Jesucristo; 5) apostasía general de la gente, al volverse del verdadero cristianismo, a las religiones falsas difundidas por falsos profetas; y 6) finalmente, el incremento de la maldad. Mientras que todo esto ya está sucediendo, cuando el final se aproxime, estas cosas se incrementarán como nunca antes, tanto en frecuencia como en intensidad.
La próxima cosa que ocurrirá será la profanación del templo en Jerusalén (Mateo 24:15). Una vez que el templo sea profanado, “… habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá.” (Mateo 24:21) Los teólogos llaman a este período la Gran Tribulación, donde Dios derramará Su ira sobre la humanidad no arrepentida. También marcará el surgimiento del último anti-Cristo, el hombre de pecado del que se habla en 2 Tesalonicenses 2:3-4.
Ahora fíjate en esto, Jesús dice “E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas. Entonces aparecerá la señal de Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria.” (Mateo 24:29-30). El regreso de Jesús a esta tierra, será precedido por una grande y terrible actividad cósmica, y entonces Su regreso será visto por todos. Este no será un “sigiloso regreso” a la tierra. Jesús lo menciona nuevamente, cuando dice, “Porque como el relámpago que sale del oriente y se muestra hasta el occidente, así será también la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24:27), certificando por medio de ello, el hecho de que nadie podrá ignorar su regreso a la tierra.
¿Tiene la descripción bíblica de la Segunda Venida algo en común con José Luis de Jesús Miranda? Si José Luis de Jesús Miranda es realmente el regreso de Cristo a esta tierra, ¿cuándo sucedieron todos estos eventos cósmicos? ¿Cuándo fue reconstruido el templo en Jerusalén para que pudiera haber sido profanado? ¿Dónde está el regreso de Jesús viniendo en “las nubes del cielo”? De acuerdo a los escritos bíblicos, José Luis de Jesús Miranda es nada más que un simple falso Mesías entre muchos otros.
Las doctrinas de José Luis de Jesús Miranda incluyen lo siguiente: Él declara que no existe el pecado y que la ley es irrelevante. Él toma estas enseñanzas de la mal-interpretación de pasajes tales como Romanos 6:2; Romanos 7:6 y Romanos 8:2. Sin embargo, estos pasajes no enseñan que no existe el pecado y que la ley es irrelevante. Más bien ellos enseñan que el poder de la ley y el poder del pecado fueron vencidos cuando Jesucristo (el original) murió en la cruz y que al poner nuestra fe en Él (el verdadero Jesús) somos librados del castigo de la ley. El apóstol Juan dijo que “Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.” (1 Juan 1:8) Romanos 7:15-24 es una declaración de que aún el apóstol Pablo (cuyas enseñanzas José Luis de Jesús Miranda cree que son las únicas enseñanzas que deben ser impartidas) batallaba con el pecado en su vida.
Más aún, la ley, lejos de ser irrelevante, es una parte necesaria del código moral de Dios. Pablo dice en Romanos 7:7 que él no hubiera conocido la codicia si la ley no dijera: “No codiciarás”. La ley nos señala nuestro pecado y nos conduce a Cristo. Cierto, la ley no tiene poder cuando obtenemos nuestra justificación ante Dios, pero ésta no es irrelevante.
José Luis de Jesús Miranda también declara que no hay infierno. Sin embargo, Jesús enseñó más sobre el infierno de lo que enseñó sobre el cielo. La realidad del infierno está a través de todo el Nuevo Testamento. Él dice que no existe el diablo, sin embargo Pedro, después de la resurrección de Jesús, dice que Satanás anda como “león rugiente” (1 Pedro 5:8). Finalmente, con respecto a la opinión de José Luis de Jesús Miranda sobre la inutilidad de la oración, ¿cómo podemos referirnos a la oración como algo inútil, cuando Jesús no sólo enseña acerca de ello (Mateo 6:9-15; Lucas 11:1-13; 18:1-8), sino que la practicó a través de todo Su ministerio? De igual manera, el apóstol Pablo comienza cada una de sus epístolas con oración y acción de gracias, y frecuentemente pide a sus lectores que oren por él. Lejos de ser inútil, la oración es vital para la vida cristiana.
José Luis de Jesús Miranda es un falso Mesías y un hereje. Él asegura ser la segunda venida de Jesucristo, a pesar de la preponderante evidencia bíblica que contradice sus demandas de divinidad. Sus enseñanzas son heréticas en el sentido de que, lejos de dirigir a la gente a una vida de mayor santidad y rectitud, más parece que la guía a una vida licenciosa, de libertinaje y corrupción (sin el pecado + sin ley + sin infierno = no hay consecuencias para mis actos). Finalmente, miren la vida del hombre. Él es un ex drogadicto y ex convicto. Ahora, cualquiera puede ser salvado de sus pecados y convertirse en un cristiano, pero ¿Jesucristo Mismo se “integraría” con alguien así? ¿Qué hay de su estilo de vida? Él vive más allá de sus posibilidades por la “generosidad” de sus seguidores. ¿Haría eso Jesucristo? Él vivió la vida de un modesto predicador ambulante, “sin tener un lugar donde recostar Su cabeza.” Él jamás sacó ventaja de alguien. La Biblia nos dice que “nos cuidemos de los falsos profetas.” Concerniente a ellos dice que “por sus frutos los reconoceremos”. Juzga a José Luis de Jesús Miranda por sus frutos y se volverá totalmente claro que él no es “Jesucristo Hombre.”
Con eso en mente, surge la siguiente pregunta – ¿Es José Luis de Jesús Miranda el anticristo? Mientras que es posible que él sea el anticristo predicho en la Escritura, y el reciente tatuaje del “666” preste crédito a esta posibilidad – es difícil que José Luis de Jesús Miranda sea el anticristo. El anticristo será un líder mundial, un dictador embestido con poder satánico, un hombre que cautive a la gente con su sola presencia. José Luis de Jesús Miranda no es tal hombre, al menos no todavía. José Luis de Jesús Miranda no es nada más que un líder carismático de una secta, un charlatán, un lobo con piel de oveja, y simplemente uno más de una larga cadena de falsos profetas y falsos Mesías. Él es un anticristo, no “EL” anticristo.
Usado con permiso de GotQuestions.org